En la Casa de Campo de Madrid hay un pequeño acueducto de ladrillo, diseñado por el ingeniero y arquitecto Italiano Francesco Sabatini en 1778
El objetivo de la construcción era el de abastecer de agua a la Huerta de la Partida (de ahí el nombre), situada frente al Palacete de los Vargas. Porque cuando el agua del arroyo de Meaques, afluente del río Manzanares, no era suficiente para regar las frutas y hortalizas, éstas se echaban a perder y había que indemnizar a los arrendatarios a los que se les había garantizado el riego.
Con la construcción del acueducto se aseguró que el agua llegase desde el Lago y así no hubiese problemas de abastecimiento.
Sabatini levantó el acueducto sobre una construcción anterior de madera con de fábrica de ladrillo y un sistema de canalización de piezas machihembradas de granito.
El acueducto estuvo en uso durante cerca de un siglo hasta que se desmantelaron las huertas con motivo de la apertura del bosque al público y posteriormente se abandonó.
En tiempos de la República, en 1933, se levantó junto al acueducto una fuente para proveer de agua a los senderistas y excursionistas.
Durante la Guerra Civil, el acueducto albergó un puesto de intendencia y cocina del ejército republicano, que aprovechaba la cercanía del arroyo de Meaques para facilitar esos usos.
Dada su lejanía con respecto al frente, el acueducto no sufrió daños por la guerra, aunque su arco central fue parcialmente destruido para que pudiesen pasar los vehículos. Incluso el propio acueducto sirvió esos años de soporte para el buzón de correspondencia.
El acueducto fue restaurado en 2016 por el ayuntamiento.
Comentarios
Publicar un comentario