A veces el escenario está fuera de la carpa.
Circo del Sol en la Casa de Campo.
Un año más el circo se instala en la Casa de campo.
El 1 de marzo comenzó a montarse, primero las estructuras verticales, pieza a pieza alcanzaron 17 m, desnudas como mástiles clavados en las que ondearán cuatro banderas: la de Quebec, la de Canadá, la del Circo del Sol y la de España. Según el periódico fueron 80 operarios los que levantaron el grand chapiteau, la carpa principal, de 51 metros de diámetro que albergará a 1.500 espectadores.
Durante un mes la gran explanada de la Puerta del Angel se convierte en un pequeño pueblo móvil multinacional, con cocina, comedor, escuela (el personal viaja con sus familias), taquillas, oficinas y zonas para entrenarse. Para un personal fijo, de 162 personas de 20 nacionalidades diferentes, al que se suma unos 200 trabajadores que les ayudan en cada ciudad.
Este año vienen con el espectáculo Kooza que cuenta la historia de Innocent, un solitario melancólico que busca su lugar en el mundo.
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