Desafiando leyes la de la gravedad y la del calor.
En una entrada antigua de este blog ya comenté que entre las esculturas callejeras las que rompían la pana eran las "antigravity". Hoy me encontré con un ejemplo muy meritorio: trajeado en oro, al sol en la misma puerta del Sol con sus 35ºC de verano, apoyado en una mano y con la otra sujetando la tabla.
En una entrada antigua de este blog ya comenté que entre las esculturas callejeras las que rompían la pana eran las "antigravity". Hoy me encontré con un ejemplo muy meritorio: trajeado en oro, al sol en la misma puerta del Sol con sus 35ºC de verano, apoyado en una mano y con la otra sujetando la tabla.
Comentarios
Publicar un comentario