En un mundo digital que no se puede tocar, oler y a veces ni ver y si va todo viento en popa es "previsible", mola hacer algo con las manos, mancharte, oler la tinta, los líquidos y trabajar con el efecto sorpresa, éste último factor es inmenso en los que se inician.
Pasando el dibujo a la placa de aluminio
Pegote de betún de judea
Betún de judea extendido
Tintero y extendiendo la tinta con el rodillo
Tinta para ver el dibujo definitivo en la placa y que no seca nunca.
A la prensa
Resultados, con 4 tintas distintas
Prueba añadiendo acuarela
Comentarios
Publicar un comentario