Ruinas de San Pelayo

Ruinas de San Pelayo
Las Ruinas de San Pelayo o también conocidas como las Ruinas de San Isidoro, son los restos de una pequeña ermita románica (siglo XI) situada extramuros de la ciudad Ávila, junto al margen derecho del Río Adaja, en la divisoria de los barrios judío y moro.
Desde el año 1062, las Ruinas de San Pelayo de Ávila, pasaron a llamarse también Ruinas de San Isidoro debido a que el cuerpo de este santo descansó en ella cuando era trasladado desde Sevilla a León.

El 20 de Enero de 1896 dichos restos fueron cedidos al Ayuntamiento de Madrid y, se decidió su emplazamiento en los Jardines del Buen Retiro. En 1999 se procedió a la restauración y consolidación de las ruinas.

Las ruinas existentes hoy en día en el Parque del Retiro forman parte del Patrimonio Histórico Artístico de Madrid.
Las Ruinas de San Isidoro se componen de un paredón recto de mampostería de ladrillo visto con un arco de medio punto y otro paredón circular de las mismas características con dos capiteles tallados.
Se conserva la puerta de tres arquivoltas planas de medio punto sobre columnas y jambas y el ábside con sus ventanales y columnas adosadas.

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